La incertidumbre sobre los tipos de interés ejerce presión sobre los mercados bursátiles
El analista de BMO tranquiliza a los inversores: el aumento de los tipos de interés debería impulsar el mercado de valores. La Reserva Federal advierte contra el objetivo de inflación. Sin embargo, los expertos no ven ningún peligro. Finanzas.ch.

La incertidumbre sobre los tipos de interés ejerce presión sobre los mercados bursátiles
A principios de 2024, el ánimo en los mercados bursátiles era en general positivo, principalmente debido a la expectativa de una caída de los tipos de interés en EE.UU. Sin embargo, la incertidumbre en torno a los recortes de los tipos de interés provocó posteriormente turbulencias. Esto se debió a los precios al consumidor inesperadamente altos en Estados Unidos, que amenazaron el objetivo de inflación del dos por ciento de la Reserva Federal. La expansión económica en Estados Unidos aumentó esta incertidumbre, lo que provocó cambios en las expectativas de tasas de interés.
A pesar de la creciente volatilidad en los mercados bursátiles, Brian Belski, estratega de inversiones de BMO, mantiene la calma y no ve motivos para preocuparse. Está convencido de que el mercado de valores seguirá funcionando bien incluso con tipos de interés más altos. Contrariamente a la creencia popular de que el aumento de los tipos de interés es negativo para las acciones, Belski subraya que esto no es necesariamente cierto. Según su trabajo, los períodos fuertes de desempeño del S&P 500 a menudo estuvieron asociados con tasas de interés crecientes o más altas.
Belski sostiene que las tasas de interés cercanas a cero después de la crisis financiera de 2008 no eran la norma y que las tasas de interés más altas son fundamentalmente positivas para las acciones. Explica que las tasas de interés bajas pueden indicar un crecimiento económico lento, mientras que las tasas de interés más altas indican lo contrario. Utilizando gráficos, muestra que las tasas de interés históricamente más altas no han tenido un impacto negativo en las acciones. De hecho, desde 1990, el S&P 500 ha tenido un rendimiento anualizado más alto cuando el rendimiento del Tesoro a 10 años estaba por encima del 6 por ciento.
Además, el análisis de BMO muestra que desde 1990, el S&P 500 ha tenido un mejor desempeño cuando las tasas de interés subieron que cuando las tasas de interés bajaron. En total, ha habido ocho períodos de aumento de las tasas de interés desde 1990, y en cada uno de estos períodos las acciones tuvieron un desempeño positivo. Esto sugiere que las acciones tienden a tener un mejor desempeño durante los períodos de tasas de interés crecientes.