Alemania en crisis: ¡desempleo y recesión en niveles récord!

Alemania se enfrenta actualmente a la mayor depresión económica desde la fundación de la República Federal. Los desafíos económicos se están manifestando en una tasa de desempleo en aumento y un clima de negocios en declive. En enero de 2025, el desempleo aumentó al 6,4 por ciento, lo que representa casi tres millones de desempleados. En comparación con enero de 2024, se trata de un aumento de 187.000 desempleados. Además, el número de trabajadores con jornada reducida está aumentando, lo que indica una disminución de la oferta laboral.

Particularmente preocupante es la caída del índice de clima empresarial para los autónomos y las microempresas, que cayó de -23,4 a -24,9 puntos. Una proporción importante de autónomos, es decir, uno de cada dos, se queja de la falta de pedidos. El producto interno bruto (PIB) también cayó un 0,2 por ciento en 2024, lo que indica una recesión oficial. Este es el segundo año consecutivo en el que Alemania ha visto una contracción del PIB.

Previsiones y desafíos económicos

La situación es alarmante en comparación con otros países europeos, ya que Alemania va por detrás de países como Italia, Francia y España en términos de crecimiento económico. La Federación de Industria predice que la caída de la economía alemana continuará en 2025. Además, la inversión extranjera directa en Alemania ha caído en los últimos tres años, mientras que la diferencia entre las inversiones extranjeras en Alemania y las inversiones alemanas en el extranjero fue de alrededor de 94,1 mil millones de euros en 2023.

Además de las preocupaciones sobre el empleo y el PIB, otra fuente describe la situación económica general. El gobierno federal espera que el PIB en 2024 sea inferior al del año anterior por segunda vez consecutiva. Estos valores negativos del PIB se produjeron recientemente durante las crisis internacionales, por ejemplo durante la crisis financiera de 2009 y la pandemia del coronavirus de 2020. Alemania ha experimentado una economía estancada durante los últimos cinco años y nunca se ha vuelto a alcanzar el nivel de 2019.

A pesar de este panorama sombrío, hay pequeños rayos de esperanza. En el tercer trimestre de 2024, la economía registró una tasa de crecimiento positiva respaldada por el consumo privado. La inflación ha vuelto ahora al rango del dos por ciento. Los aumentos de los ingresos y la baja inflación han influido positivamente en los patrones de consumo de los hogares, incluso cuando la industria sigue sufriendo los altos precios de la energía.

La situación económica actual se ve aún más afectada por factores externos. La victoria electoral de Donald Trump podría tener un impacto negativo en la economía alemana, en particular mediante posibles aranceles a las importaciones de la UE. La incertidumbre generalizada entre la población y entre las empresas podría obstaculizar la recuperación económica. Sin embargo, una rápida aclaración de la situación política en Alemania podría ayudar a limitar las consecuencias económicas. ZDF informó.

Esto se complementa con estimaciones de que el gobierno federal espera un crecimiento de sólo entre el 0,8 y el 1,3 por ciento en los próximos años, mientras que la inflación en ocasiones superó el ocho por ciento, lo que ejerce una presión considerable sobre los consumidores y la economía.