Pacto comercial entre EE.UU. y Gran Bretaña: ¡bajan los aranceles a los automóviles!

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El presidente estadounidense Trump y el primer ministro Starmer avanzan en el pacto comercial en la cumbre del G7 en Canadá, con recortes arancelarios a los automóviles británicos.

Pacto comercial entre EE.UU. y Gran Bretaña: ¡bajan los aranceles a los automóviles!

Al margen de la cumbre del G7 en Canadá, el presidente estadounidense Donald Trump y el primer ministro británico Keir Starmer lograron avances significativos en el pacto comercial anunciado en mayo. Este se considera el primer acuerdo importante de Estados Unidos con un socio comercial desde que se introdujeron los aranceles en abril. Trump firmó un reglamento que proporciona desgravación arancelaria para hasta 100.000 automóviles británicos al año, lo que es de gran importancia para la industria automovilística británica. Las exportaciones británicas a Estados Unidos enfrentan actualmente aranceles del 10% sobre la mayoría de los bienes y del 25% sobre el acero, el aluminio y los automóviles. Las nuevas reglas reducen los aranceles sobre 100.000 vehículos británicos al 10%, al tiempo que abren el mercado estadounidense para la carne británica y el etanol con un acceso más fácil.

Además, se anunció la desgravación aduanera para piezas de aviones procedentes de Gran Bretaña. Gran Bretaña planea importar aviones Boeing por valor de 10 mil millones de dólares. A pesar de este progreso, el levantamiento de los aranceles estadounidenses sobre el acero y el aluminio británicos no está previsto por el momento, y el Secretario de Comercio de EE.UU. deberá decidir en una fecha posterior sobre una posible reducción arancelaria, dependiendo de las concesiones británicas en las cadenas de suministro y los productos agrícolas.

Detalles sobre el nuevo pacto comercial

Los socios negociadores británicos no describen el acuerdo como un acuerdo de libre comercio tradicional, sino como un marco para áreas específicas que deberían permitir futuras negociaciones. El propio Trump calificó el acuerdo como un “gran honor” y anunció que hay muchos más acuerdos en el horizonte. Queda por ver si estos avances podrían obstaculizar el acercamiento de Gran Bretaña a la UE, ya que los estados de la UE pueden estar en desventaja por el momento.

El portavoz del gobierno británico destacó el enfoque tranquilo y pragmático de las negociaciones. Dada la situación económica actual en el Reino Unido, la industria automovilística depende en gran medida de las exportaciones a Estados Unidos. El volumen comercial entre los dos países fue de alrededor de 370 mil millones de euros el año pasado, y el 70% de las exportaciones británicas a Estados Unidos comprenden servicios no afectados por aranceles. En este contexto, también se discute la reducción del impuesto a los servicios digitales.

En conclusión, el nuevo pacto comercial entre Estados Unidos y el Reino Unido presenta tanto oportunidades como desafíos. Dadas las incertidumbres actuales en el panorama del comercio mundial, sigue siendo esencial seguir de cerca la evolución de los acontecimientos en los próximos meses.