Thyssenkrupp se enfrenta a una tala radical: ¡el 50% de los puestos de trabajo en riesgo!

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Thyssenkrupp planea una reestructuración radical: recortes de empleo del 50%, venta de la división de acero y reorientación estratégica.

Thyssenkrupp se enfrenta a una tala radical: ¡el 50% de los puestos de trabajo en riesgo!

Thyssenkrupp se enfrenta a una reestructuración radical. Según informa el periódico “Bild”, el grupo planea transformarse en un holding y vender partes de la empresa. El director general, Miguel López, ha anunciado que la división siderúrgica, que más de 200 años después de su fundación se eliminará progresivamente del sector siderúrgico, cotizará en bolsa. Esta división emplea a unas 16.000 personas y genera unas ventas anuales de más de 12.000 millones de euros. Sin embargo, se considera que el interés en la división siderúrgica menos lucrativa es bajo, lo que pone en duda la salida a bolsa prevista. Hace apenas unas semanas, López describió el comercio de acero como el negocio principal.

La división de proveedores de automóviles también está en el centro de la reestructuración. Aquí se están considerando cierres o ventas, de modo que sólo pueda quedar una “cubierta” del negocio. También son inminentes importantes recortes en la administración. La sede corporativa podría reducirse de los 500 empleados actuales a unos 100 empleados. En total, más del 50 por ciento de los 98.000 empleados actuales podrían ser despedidos. Estos cambios drásticos podrían poner en grave peligro la estructura corporativa existente, y los conocedores ya señalan que Thyssenkrupp podría, en última instancia, disolverse efectivamente.

Reacciones y preocupaciones políticas

Los planes de largo alcance aún deben ser aprobados por el consejo de supervisión, en cuya reunión del 16 de septiembre también se incluye en el orden del día la prórroga del contrato de Miguel López. En el ámbito político, las reacciones son alarmantes. Sarah Philipp, del SPD de NRW, y Jochen Ott, líder del grupo parlamentario del SPD, expresan su gran preocupación por los posibles efectos en Renania del Norte-Westfalia como zona industrial. Dennis Radtke, presidente federal del CDA, pide también apoyo político y la exclusión de los despidos forzosos.

Se siguen las negociaciones sobre el destino de Thyssenkrupp, en particular en lo que respecta a las subvenciones por valor de cientos de millones de euros para la conversión a tecnologías “verdes” en la división Steel Europe. Cabe señalar que no existe ninguna obligación de mantener puestos de trabajo con esta financiación. El parlamento regional de Renania del Norte-Westfalia abordará esta cuestión con gran urgencia, ya que la empresa garantiza numerosos puestos de trabajo en la región.

Inseguridad entre los empleados

El presidente del comité de empresa de Thyssenkrupp Steel, Tekin Nasikkol, informa de una considerable incertidumbre y malestar entre los trabajadores. Los planes de reestructuración y el consiguiente temor por sus puestos de trabajo ejercen una enorme presión sobre los empleados y provocan un ambiente tenso en la empresa. La implicación del multimillonario checo Daniel Kretinsky en el sector siderúrgico también plantea interrogantes adicionales, sobre todo en lo que respecta a las futuras inversiones y la estabilidad del negocio.

En resumen, Thyssenkrupp se encuentra en una fase crucial en la que es necesario reevaluar tanto las estrategias corporativas como la responsabilidad social hacia los empleados. La gerencia se enfrenta al desafío de lograr que la conversión sea exitosa manteniendo al mismo tiempo la confianza de la fuerza laboral.

Para más detalles sobre este tema, nos remitimos a los informes de Enfocar y WDR.