Estados Unidos y China en la mesa de negociaciones: ¡la disputa comercial vuelve a escalar!
China y Estados Unidos están iniciando conversaciones para resolver el conflicto comercial. Los temas importantes incluyen las restricciones a la exportación de tecnología y las tierras raras.
Estados Unidos y China en la mesa de negociaciones: ¡la disputa comercial vuelve a escalar!
El 9 de junio de 2025 tendrán lugar en Londres nuevas conversaciones entre Estados Unidos y China para desactivar el conflicto comercial en curso. En este importante encuentro participan altos representantes de ambos países. Por el lado chino, estará presente el viceprimer ministro He Lifeng, mientras que Estados Unidos estará representado por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, el secretario de Comercio, Howard Lutnick, y el representante comercial, Jamieson Greer. Esta ronda de negociaciones, la primera desde el acuerdo comercial de mayo que incluyó una suspensión temporal de aranceles elevados, surgió de una llamada telefónica entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder chino, Xi Jinping.
Los puntos clave de discordia en las negociaciones incluyen las restricciones estadounidenses a las exportaciones de tecnología a China y los controles de China a las exportaciones de tierras raras. Estas materias primas estratégicas son cruciales para muchas industrias y China posee más del 90 por ciento de la producción mundial. Daher wird das Land a menudo como monopolista en este Bereich angesehen. Los nuevos controles de exportación de China exigen que los exportadores obtengan permisos para ciertas tierras raras y definan a qué empresas occidentales quieren suministrar. Estas masas son una reacción directa hacia el 145 por ciento de la población de Trump.
Consecuencias de las negociaciones comerciales
El conflicto comercial entre las dos potencias mundiales ya ha provocado un déficit comercial de Estados Unidos con China de casi 300.000 millones de dólares. En 2024, Estados Unidos exportó bienes por valor de 143 mil millones de dólares a China, mientras que las importaciones desde China alcanzaron los 439 mil millones de dólares. Con sus aranceles, el objetivo de Trump es reducir este déficit mediante impuestos más altos y fortalecer la producción nacional. Pero los críticos empresariales advierten sobre el impacto potencialmente negativo de mayores tarifas de importación sobre los precios y el crecimiento económico.
Los nuevos controles de exportación de China podrían tener consecuencias significativas para las cadenas de suministro globales. Desde diciembre se aplican restricciones similares a otros elementos críticos, como el galio y el germanio. En el pasado se ha demostrado que China está dispuesta a utilizar su política exportadora como medio económico de presión; En 2010, una prohibición de exportación de tierras raras provocó un aumento espectacular de los precios, especialmente en Japón.
Trump también ha anunciado o ya ha implementado numerosos aranceles nuevos como parte de su política comercial, incluida una penalización adicional del 10 por ciento sobre casi todas las importaciones. La legalidad de estas medidas se está examinando actualmente en varios procedimientos y Trump también está considerando llevar el litigio ante el Tribunal Supremo. Los dirigentes de China piden ahora una revocación de las medidas estadounidenses que se consideran desventajosas y una evaluación objetiva del progreso de las negociaciones.
Por lo tanto, las próximas conversaciones y las cuestiones subyacentes son importantes no sólo para los socios comerciales inmediatos, sino también para la estabilidad económica mundial, que podría verse afectada por estas tensiones. Se siguen de cerca los acontecimientos, ya que podrían afectar potencialmente a países como Alemania y Japón.