Los permisos de construcción en Sylt cayeron un 17 por ciento
Lea cómo se han desplomado los permisos de construcción en Sylt y los expertos advierten sobre el aumento de los precios inmobiliarios. Una mirada al floreciente mercado de la isla del Mar del Norte.

Los permisos de construcción en Sylt cayeron un 17 por ciento
La crisis inmobiliaria también ha llegado a la lujosa isla de Sylt, en el Mar del Norte. Los permisos de construcción han caído un 17 por ciento, lo que hace temer a los expertos que la falta de nuevas construcciones seguirá haciendo subir los precios de la vivienda. Esto llega en un momento en que los precios ya son astronómicos. En Kampen, por ejemplo, una vivienda unifamiliar en una zona de marismas y dunas cuesta al menos 16 millones de euros. Se venden casas adosadas o adosadas por entre 4,4 y 10 millones de euros.
El año pasado, la autoridad de construcción del distrito competente en Husum, Schleswig-Holstein, sólo aprobó la construcción de 194 casas y apartamentos en la isla de Sylt, un descenso del 17 por ciento en comparación con el año anterior. Esta fuerte caída en los permisos de construcción continúa una tendencia que también se puede observar en el territorio continental de Alemania. En enero de 2024, el número de permisos de construcción concedidos en todo el país cayó un 23,5 por ciento en comparación con el año anterior, a pesar de la gran demanda de espacio habitable en muchas regiones de Alemania.
La escasez de oferta podría provocar un aumento de los precios en el mercado inmobiliario, tanto de segundas residencias como de apartamentos vacacionales y permanentes. Los habitantes de Sylt podrían verse especialmente afectados por el aumento de los precios inmobiliarios, lo que podría significar que muchos ya no pueden permitirse el lujo de tener su propia isla y se ven obligados a trasladarse al continente. Los mayores costes de construcción, los materiales caros, los tipos de interés más elevados y los exigentes estándares energéticos contribuyen a este difícil desarrollo. Por ello, los agentes inmobiliarios de la isla exigen que se reduzcan los estándares para reducir los costes de construcción de una casa.