Las olas de calor aumentan: ¡así se protegen las ciudades del sol del verano!

Las olas de calor aumentan: ¡así se protegen las ciudades del sol del verano!

Los efectos amenazadores de las olas de calor en las zonas urbanas son cada vez más evidentes. Las olas de calor están aumentando y las ciudades se están convirtiendo cada vez más en Islas de Calor Urbanas (UHI), donde las temperaturas son significativamente más altas que en las zonas rurales. Se pronostica que las temperaturas globales aumentarán un promedio de tres grados para 2100. En las zonas urbanas, este aumento podría llegar a seis grados. Georg Grassl, socio asociado de Drees & Sommer, enfatiza la urgencia de promover la construcción y renovación adaptadas al clima para hacer frente a los desafíos de la crisis climática. Haufe.de informa que las medidas de ahorro de energía, como un mejor aislamiento, también pueden proporcionar protección contra el calor.

Un problema importante en el desarrollo de Urban Heat Island es la "densa infraestructura" que es responsable de las temperaturas más altas en las zonas del centro de la ciudad. Las superficies de hormigón y asfalto atrapan el calor y la alta densidad de los edificios reduce el flujo de aire. Al mismo tiempo, la falta de espacios verdes reduce el enfriamiento natural. Estos cambios climáticos tienen graves consecuencias, incluidos riesgos para la salud causados ​​por insolación, deshidratación y problemas respiratorios, especialmente en grupos vulnerables. Además, el aumento del consumo de energía, especialmente debido al funcionamiento del aire acondicionado, ya representa el 10% del consumo mundial de electricidad y representa una carga adicional para el medio ambiente. Sigmaearth.com muestra que esta situación también puede tener consecuencias económicas, ya que los costos de energía aumentan y la productividad disminuye.

Estrategias para enfriar las ciudades

En este contexto, Grassl pide medidas específicas para reducir los aspectos de la formación de islas de calor urbanas. Los ejemplos incluyen el análisis de puntos críticos en las ciudades y el apoyo específico a grupos de población vulnerables al calor, como residencias de ancianos y escuelas. En este contexto, en Rastatt se inició un impresionante proyecto en el que se plantaron 1.000 nuevos árboles con fines de refrigeración. También Sigmaearth.com destaca la importancia del verde: los árboles no sólo proporcionan sombra, sino que también contribuyen en gran medida a enfriar y mejorar la calidad del aire.

También existen estrategias alternativas para la plantación de árboles, especialmente en los centros urbanos densamente urbanizados. Medidas como la ecologización de fachadas y tejados, la protección de pérgolas y el sombreado mutuo de los edificios son esenciales para reducir la temperatura de las superficies. El uso de techos frescos y aceras que reflejen la luz del sol, así como la promoción de edificios energéticamente eficientes y la expansión del transporte público también son enfoques prometedores.

Una mirada hacia adelante

El ejemplo de la iniciativa “Million Trees NYC” de la ciudad de Nueva York, en la que se plantaron un millón de árboles, ilustra cómo las medidas específicas pueden influir positivamente en el clima de las ciudades. Estas iniciativas estratégicas son cruciales para reducir los impactos negativos del efecto UHI y hacer que los espacios urbanos sean más habitables. La integración de espacios verdes, construcciones respetuosas con el clima y soluciones energéticamente eficientes podría ser la clave para proporcionar a las generaciones futuras un entorno de vida saludable.