El rey Carlos bajo presión: ¿qué pasará con la costosa Frogmore Cottage?
El rey Carlos III se enfrenta al desafío de darle un buen uso a la cabaña Frogmore Cottage vacante ahora que Harry y Meghan se han mudado.
El rey Carlos bajo presión: ¿qué pasará con la costosa Frogmore Cottage?
Frogmore Cottage, una propiedad histórica en los terrenos del Castillo de Windsor, ha estado vacía desde que el Príncipe Harry y la Duquesa Meghan se mudaron. El lujoso edificio vacío, que la reina Isabel II regaló a la pareja como regalo de bodas, tiene cuatro dormitorios y habitaciones para niños. Después de que los Sussex se mudaron a los EE. UU. en 2020, la cabaña fue ocupada temporalmente por la princesa Eugenia y su esposo Jack Brooksbank, pero ahora ellos también abandonan la isla británica y viven en Portugal.
Los bienes y uso de esta finca representan al rey Carlos III. ante una decisión importante. Como propietario de la propiedad, enfrenta presión para encontrar un uso viable para Frogmore Cottage. El experto en bienes raíces Robin Edwards ha hecho sugerencias al respecto, que van desde alquileres comerciales hasta alojamiento para huéspedes de alto perfil.
Un legado histórico bajo presión
Frogmore Cottage fue construida por la reina Charlotte en 1801 y tiene una relevancia histórica notable. También fue la residencia de la Gran Duquesa Xenia Alexandrovna en la década de 1920 después de que ella abandonó Rusia. A pesar de su importancia histórica, el continuo desuso de la propiedad podría considerarse controvertido, como advierte Edwards.
La casa fue renovada por los Sussex a un costo de £ 2,4 millones, cantidad que han reembolsado en su totalidad. Después de sus deberes oficiales como miembros de la realeza, la propiedad fue ocupada en la primavera de 2019, pero Harry y Meghan la abandonaron permanentemente en 2023 después de que no se renovó su licencia.
Consideraciones financieras y posible uso.
La posibilidad de alquiler comercial se considera económicamente atractiva. Se estima que Frogmore Cottage podría generar ingresos mensuales de más de 35.000 euros, lo que daría como resultado unos ingresos anuales de poco menos de 475.000 libras esterlinas. Sin embargo, el rey Carlos también debe considerar los costos de mantenimiento continuos antes de tomar una decisión final.
Si Harry y Meghan finalmente rechazan la propiedad, la Familia Real está planeando varias opciones para su uso futuro. Las posibles opciones incluyen alquilarlo a prospectos adecuados de alto perfil que estarían sujetos a una autorización de seguridad, o usarlo como alojamiento para miembros de alto rango de la casa real o invitados de estado durante eventos importantes en Windsor. También se sugirió alquilarlo al príncipe Andrés, lo que él rechazó.
Por lo tanto, el futuro de Frogmore Cottage sigue siendo incierto, pero la decisión del rey Carlos en este segundo año de su reinado será crucial para la continuidad de este importante legado.
Para obtener más información, consulte los artículos de becerro y marieclaire.com.