Procter & Gamble está invirtiendo miles de millones para transformar su negocio con clientes corporativos en mercados difíciles. Las medidas afectan a Argentina y Nigeria, entre otros.

Procter & Gamble está invirtiendo miles de millones para transformar su negocio con clientes corporativos en mercados difíciles. Las medidas afectan a Argentina y Nigeria, entre otros.

Procter & Gamble estimó los costes de la conversión entre mil millones y quinientos millones de dólares, incluidos los gastos por la discontinuación de unidades de negocio y los efectos de las divisas. Los costes se contabilizarán durante este ejercicio y el próximo (hasta finales de junio de 2025). El grupo también está cancelando 1.300 millones de dólares de la marca Gillette, que adquirió hace años. Las acciones de P&G perdieron temporalmente un 3,72 por ciento a 146,41 dólares en la Bolsa de Nueva York.

Según un informe de www.finanzen.net,

Procter & Gamble, un grupo estadounidense de bienes de consumo, está planeando reestructurar su negocio en algunos mercados difíciles, especialmente con clientes corporativos, y está invirtiendo miles de millones de dólares para hacerlo. Esto se debe a las difíciles condiciones económicas en las regiones afectadas, como Argentina y Nigeria. Las inversiones ascienden a entre mil millones y quinientos millones de dólares para los próximos ejercicios con el fin de reorientar partes del negocio y cubrir los efectos de los tipos de cambio. La compañía también está cancelando 1.300 millones de dólares en la marca Gillette. Estas medidas podrían afectar al mercado, a los consumidores y a la industria.

Las inversiones en la renovación demuestran que Procter & Gamble se está adaptando a las condiciones del mercado para seguir siendo competitivo a largo plazo. Al realinearse en mercados difíciles, la empresa podría beneficiarse de un negocio estable y rentable a largo plazo. Sin embargo, los costos y amortizaciones a corto plazo de la marca Gillette podrían tener un impacto temporal en los precios de las acciones.

Estas medidas estratégicas para adaptarse a las difíciles condiciones del mercado son un paso importante para garantizar la competitividad de Procter & Gamble y fortalecer el potencial de crecimiento a largo plazo de la empresa.