Proton saca conclusiones: ¡Suiza debe pasar a la ofensiva contra la vigilancia!
Proton detiene sus inversiones en Suiza debido a las reformas de vigilancia previstas y está trasladando infraestructura a Alemania y Noruega.
Proton saca conclusiones: ¡Suiza debe pasar a la ofensiva contra la vigilancia!
La empresa tecnológica Proton, con sede en Ginebra, ha decidido congelar por el momento sus inversiones en Suiza. El motivo de esta decisión son los cambios previstos en la Ley de Servicios de Inteligencia y en el Reglamento sobre la Vigilancia del Tráfico de Correos y Telecomunicaciones, solicitados por el Consejo Federal. El jefe de Proton, Andy Yen, critica la reforma por considerarla extrema y teme la introducción de una vigilancia masiva que obligaría a las empresas suizas a espiar a sus usuarios en nombre del Estado. Yen hace una comparación con Google y advierte que la privacidad de los servicios ofrecidos por Proton se reduciría significativamente si los cambios entraran en vigor. Proton aún no ha recibido ninguna garantía de que se abordarán las preocupaciones de la industria.
Como resultado de estos desarrollos, la compañía planea reubicar significativamente su infraestructura física. El plan es construir centros de datos de IA fuera de Suiza para garantizar la confidencialidad. Proton quiere instalar servidores en Alemania y Noruega para ejecutar su IA llamada Lumo, un chatbot impulsado por IA con cifrado de extremo a extremo. Este traslado de los servidores está valorado en unos cien millones de francos y podría tener consecuencias a largo plazo para Proton, ya que esta decisión es irreversible.
Planes de inversión a largo plazo a pesar de las incertidumbres
Proton prevé invertir más de mil millones de francos hasta finales de la década para competir en Europa con empresas como Google. Si bien la mayoría de estas inversiones se destinan al extranjero, todavía se podrían invertir 900 millones de francos en Ginebra. Sin embargo, sigue siendo incierto cuándo y si Proton podrá revisar sus planes si cambia el marco legal en Suiza. Yen subraya que Proton sólo abandonará Suiza si se ve obligado a hacerlo.
La reubicación de la infraestructura responde a los cambios previstos en los requisitos de vigilancia en Suiza. Estos cambios podrían requerir que los proveedores almacenen los datos de los clientes durante seis meses y permitan un seguimiento en tiempo real. En este contexto, el gobierno federal ha dejado claro que los poderes del servicio de vigilancia no se ampliarán y que la vigilancia masiva es inconstitucional. Sin embargo, la mayoría de los cantones aprobaron las propuestas, lo que generó críticas de diversos sectores, incluida la Asociación Sociedad Digital.
Proton también necesita vigilar la demanda de sus productos. Yen afirma que la empresa no puede permitirse una pausa en las inversiones, ya que podría ser fatal debido a la creciente demanda de sus servicios. Está prevista una reunión entre Yen y el Departamento de Justicia para finales de mes, pero ya está claro que las primeras inversiones en el extranjero se realizarán independientemente de las conversaciones políticas. El centro de datos de Ginebra ya se cerró, lo que acelera aún más la transición a nuevos mercados.