Decisión sobre las tasas: la Sparkasse de Berlín debe pagar
Sentencia judicial contra la Sparkasse de Berlín: los clientes podrían beneficiarse de aumentos de tarifas inaceptables. ¿Qué impacto tiene el fallo? ¡Descubre más aquí!

Decisión sobre las tasas: la Sparkasse de Berlín debe pagar
La Sparkasse de Berlín aumentó recientemente las tarifas sin el consentimiento explícito de los clientes, lo que provocó una emotiva batalla legal entre los defensores de los consumidores y las cajas de ahorros. Ahora, una sentencia judicial de primera instancia ha determinado que la Sparkasse de Berlín ha aumentado ilegalmente las tarifas de las cuentas corrientes desde 2016. Esta decisión podría afectar a un gran número de clientes de la Sparkasse.
Según la Asociación Federal de Organizaciones de Consumidores (vzbv), a la Sparkasse de Berlín no se le permitía aumentar ni introducir nuevas tarifas sin el consentimiento de los clientes. Una demanda presentada por el vzbv ante el Tribunal de Apelación de Berlín condujo a este claro veredicto. El tribunal calificó la demanda como justificada en aspectos clave y podría ofrecer a los clientes reembolsos futuros tan pronto como la sentencia sea firme.
El centro de atención al consumidor acusa a la Sparkasse de Berlín de haber aumentado varias veces las tarifas sin el consentimiento explícito de los clientes. Un ejemplo concreto fue el cambio de la “cuenta corriente Comfort” a la “tarifa plana Giro” a finales de 2016, acompañado de un aumento unilateral de tres euros en la cuota mensual. Debido a la negativa de la Sparkasse a reembolsar las cantidades excedentes, los defensores del consumidor presentaron una demanda colectiva, un modelo de acción declarativa.
La sentencia también podría repercutir en otros clientes de la Sparkasse, ya que casos similares están pendientes en otras instituciones como la Sparkasse Köln/Bonn. La demanda en curso está en suspenso a la espera del fallo de Berlín, que podría dar a los clientes la esperanza de un reembolso. En principio, los clientes podrían esperar un reembolso si los términos y condiciones generales (CGC) del banco estipulan que los clientes aceptan los cambios si no se oponen en un plazo de dos meses. Sin embargo, hacer valer reclamaciones conlleva el riesgo de que los bancos cancelen la cuenta con términos y condiciones modificados.