Derecho a la reducción de precios por Internet lento: así los consumidores hacen uso de su derecho

Derecho a la reducción de precios por Internet lento: así los consumidores hacen uso de su derecho

Según un informe de www.deutschlandfunk.de,

Desde mediados de diciembre de 2021, los consumidores tienen derecho a reducir los precios si la Internet de su hogar es peor que la garantizada contractualmente. La discrepancia entre la tarifa de datos prometida contractualmente y la real debe demostrarse mediante una herramienta de medición de la Agencia Federal de Redes, www.breitbandmessage.de.

La Asociación Federal de Organizaciones de Consumidores (VZBV) pide una reducción global de 15 euros al mes hasta que se elimine el déficit. Sin embargo, la asociación industrial VATM se opone a una reducción general de tarifas y sostiene que se debe considerar cada caso individual, ya que los contratos disponibles en el mercado contienen servicios muy diferentes. Los proveedores de Internet como Vodafone y Deutsche Telekom destacan que invierten mucho dinero en su red para permitir una conexión más rápida y estable.

Según la Agencia Federal de Redes, entre mediados de diciembre de 2021 y finales de diciembre de 2022, alrededor de 108.000 internautas iniciaron la necesaria campaña de medición, pero sólo 29.000 de ellos la completaron y en casi todos los casos se les certificó que tenían derecho a una reducción de precio. Muchas personas cancelaron la campaña antes, ya sea porque el teléfono fijo de su casa no era tan malo como se pensaba inicialmente o porque era demasiado laborioso realizar las 30 mediciones en el tiempo requerido.

Esta nueva regulación puede tener un impacto significativo en el mercado. Los proveedores de Internet ahora deben esperar que más consumidores hagan uso de su derecho a reducir los precios y reclamen una reducción de precios. Esto podría generar una mayor pérdida de clientes, ya que los consumidores pueden verse inclinados a cambiar de proveedor si su ISP no tiene un buen desempeño. Además, los proveedores podrían verse obligados a invertir más en mejorar sus redes para brindar los servicios requeridos y evitar reducciones de precios.

Sin embargo, el hecho de que muchos consumidores abandonen la campaña de medición también muestra que el proceso puede resultar demasiado oneroso para los consumidores y que puede ser necesaria una simplificación para llegar a un mayor número de consumidores y garantizar reducciones justas de precios.