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Advertencia sobre sobredosis de vitaminas en niños: los centros de asesoramiento al consumidor hacen sonar la alarma
Los defensores de los consumidores advierten: las pastillas vitamínicas para niños suelen ser caras, inútiles y perjudiciales para la salud. El control del mercado muestra productos con sobredosis y similares a caramelos. Los expertos piden valores máximos vinculantes. #Pastillas vitamínicas #niños #salud
Advertencia sobre sobredosis de vitaminas en niños: los centros de asesoramiento al consumidor hacen sonar la alarma
Los padres que quieran hacer algo bueno por sus hijos con pastillas vitamínicas deben tener cuidado, según la Asociación Federal de Centros de Atención al Consumidor (vzbv). La jefa del vzbv, Ramona Pop, advirtió contra la administración de dosis demasiado altas y pastillas de vitaminas médicamente innecesarias a los niños. En la mayoría de los casos, los niños no necesitan suplementos nutricionales y sólo deben tomarlos después de consultar a un médico. Estos productos suelen ser caros, inútiles o incluso perjudiciales para la salud.
Un estudio de mercado realizado por centros de asesoramiento al consumidor muestra que muchos complementos nutricionales destinados a los niños tienen dosis demasiado altas, contienen ingredientes innecesarios y recuerdan más a los dulces que los complementos nutricionales saludables. De los 33 productos examinados, 23 excedieron los niveles de consumo recomendados de vitaminas y minerales de la Sociedad Alemana de Nutrición para niños de entre cuatro y siete años.
Según los expertos, algunos de los productos examinados parecen caramelos. Seis productos incluso superan las cantidades máximas para adultos sugeridas por el Instituto Federal de Evaluación de Riesgos. Por lo tanto, el vzbv exige valores máximos obligatorios de vitaminas y minerales en los suplementos dietéticos, que también deberían basarse en grupos de edad. Hasta la fecha, estos productos no están sujetos a ningún proceso de aprobación y no se ha probado su seguridad o eficacia.
Se propone que la ley prohíba el riesgo de que los productos se confundan con dulces y que los fabricantes no den la impresión de que los suplementos dietéticos promueven la salud o el rendimiento educativo. Con estas exigencias se pretende que los padres sean más conscientes de la administración de vitaminas a sus hijos y que la salud de los niños no se vea comprometida por suplementos nutricionales inadecuados.