Escándalo en torno a los políticos del Partido Verde: ¡Las acusaciones falsas destruyen carreras!

Transparenz: Redaktionell erstellt und geprüft.
Veröffentlicht am

Stefan Gelbhaar perdió su mandato tras falsas acusaciones de acoso. Los Verdes están investigando hechos graves.

Escándalo en torno a los políticos del Partido Verde: ¡Las acusaciones falsas destruyen carreras!

Stefan Gelbhaar, miembro del Bundestag de 48 años de Prenzlauer Berg en Berlín, ha perdido su mandato debido a acusaciones de acoso sexual. Sin embargo, se descubrió que estas acusaciones eran en gran medida inventadas, lo que hacía que la situación fuera aún más escandalosa. Como resultado directo de los acontecimientos, Andreas Audretsch, director de campaña de Robert Habeck, fue elegido para el mandato de Gelbhaar.

Una política regional del Partido Verde, Shirin Kreße, está en el centro de la polémica porque se hizo pasar por la mujer en cuestión y presentó una declaración jurada falsa acusando a Gelbhaar de acoso sexual. Rundfunk Berlin-Brandenburg (RBB) informó sobre las acusaciones, pero tuvo que retirarlas y admitió que no habían respetado las normas periodísticas.

Acontecimientos impactantes en la asociación regional de Berlín

El candidato a canciller Robert Habeck calificó los acontecimientos ocurridos en la asociación regional de Los Verdes de Berlín como graves y escandalosos. En respuesta a los incidentes, pidió una investigación exhaustiva. La Asociación Federal de los Verdes ha fijado altas prioridades para esclarecer los incidentes. Felix Banaszak, líder federal del Partido Verde, lamentó el daño causado a Cabello Amarillo.

El partido ya ha iniciado un procedimiento de expulsión contra Kreße, quien anunció su dimisión el mismo día. Banaszak habló de pruebas de presuntas declaraciones falsas y apuntó a una “energía criminal”. También se informó que siete personas mantuvieron sus informes contra el cabello amarillo, a pesar de que inicialmente doce personas sospechosas de estar afectadas habían informado.

Procesamiento interno y crítica.

Se encargó a una comisión interna de Los Verdes, encabezada por Anne Lütkes y Jerzy Montag, que se ocupara de los incidentes. Esta comisión tiene como objetivo aclarar cómo el partido abordó las acusaciones. El comité ejecutivo federal se declaró estructuralmente abrumado, especialmente en vista de las próximas elecciones federales. El propio Gelbhaar calificó la situación de “pesadilla” y criticó la falta de estatutos y estructuras claras en el procedimiento del Defensor del Pueblo.

La dirección del Partido Verde de Berlín acogió con satisfacción el anuncio de aclaración del partido federal. Paula Piechotta, presidenta del grupo regional del Este, abogó por la rehabilitación de Gelbhaar tan pronto como se aclaren las acusaciones. Mientras tanto, el CSU se mantiene firme y exige a Habeck una explicación personal sobre las acusaciones, lo que aumenta aún más la presión sobre el partido.

Todos estos acontecimientos muestran que el caso Gelbhaar no sólo tiene consecuencias individuales, sino también el potencial de influir en los Verdes en su conjunto. El resultado de las elecciones federales podría verse afectado por la rápida escalada de los acontecimientos, lo que no hace más que aumentar las expectativas sobre los procesos de procesamiento.