El ministro federal de Economía, Reiche, advierte contra las falsas esperanzas en la recuperación
La ministra federal de Economía, Katherina Reiche, se pronuncia sobre la situación económica de Alemania de aquí a 2025 y destaca la necesidad de reformas sostenibles.

El ministro federal de Economía, Reiche, advierte contra las falsas esperanzas en la recuperación
El 21 de junio de 2025, la ministra federal de Economía, Katherina Reiche, expresó un cauto optimismo sobre el auge económico de Alemania. Sin embargo, al analizar las perspectivas económicas, advierte que los efectos de avance de las disputas comerciales con los EE.UU. no deberían llevar a conclusiones falsas. Reiche destaca que se necesitan reformas sostenibles por parte del nuevo gobierno federal para garantizar un repunte estable.
El presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, predice que Alemania podría perder por poco su tercer año de crecimiento cero en 2025. El crecimiento en el primer trimestre de 2023 fue del 0,4 por ciento, lo que resulta ser el doble de lo calculado originalmente. Sin embargo, los economistas esperan que miles de millones en gastos en infraestructura y defensa estimulen la economía a partir de 2026 a más tardar.
Demanda de inversiones en infraestructura
Durante su visita a EE.UU., Reiche subrayó la importancia de llegar rápidamente a un acuerdo en el conflicto aduanero, que cuesta a la economía alemana millones de euros al día. Más de 6.000 empresas alemanas tienen sedes en EE.UU. y crean más de 900.000 puestos de trabajo. El objetivo de su visita es apoyar las negociaciones con la UE en una fase delicada y mantener conversaciones con el Secretario del Tesoro de los EE.UU., Scott Bessent, y el Secretario de Comercio, Howard Lutnick. Reiche confía en que se pueda llegar a un acuerdo antes de la fecha límite del 9 de julio.
Los acontecimientos geopolíticos desde 2016, incluidas las administraciones de Trump, el Brexit, la pandemia de Covid y el conflicto de Ucrania, tienen implicaciones clave para la seguridad de las cadenas de suministro y la necesidad de organizar la infraestructura crítica como un centro global. En este contexto, la implementación de inversiones en infraestructura en EE.UU., la eurozona y China se considera imperativa para garantizar una recuperación económica sostenible. La administración Biden ya aprobó leyes para fomentar la inversión en infraestructura, incluida la Ley de Reducción de la Inflación y la Ley de Empleo e Inversión en Infraestructura.
El camino hacia una mayor inversión
En la UE, se prevé que las inversiones en infraestructura digital totalicen 170 mil millones de euros para 2030, y se necesitará un 5 por ciento adicional del PIB de la UE para aumentar la competitividad. Un proyecto de IA con un presupuesto de 200 mil millones de euros pretende ayudar a Europa a alcanzar a Estados Unidos. La necesidad de sustituir las antiguas infraestructuras de comunicaciones, energía, agua y transporte se considera un incentivo adicional para la inversión.
Las expectativas de un desarrollo económico positivo se ven aún más reforzadas por el actual proteccionismo y el cambio geopolítico. Estados Unidos depende específicamente del comercio recíproco, mientras que medidas como los aranceles a las importaciones sirven como instrumentos de negociación para ubicar instalaciones de producción en su propio país. Este desarrollo podría llevar a que Estados Unidos se convierta en el lugar preferido para las inversiones en infraestructura.
En general, Reiche considera que una recuperación económica es crucial para el papel de Alemania como mayor potencia económica de Europa y enfatiza que los desafíos actuales también podrían representar oportunidades para una realineación fundamental de la economía. Las inversiones en infraestructura y defensa parecen indispensables para garantizar la competitividad a largo plazo y responder adecuadamente a los desafíos del futuro.