La economía turca está creciendo, pero los altos tipos de interés y la debilidad de la lira están causando problemas a la población. ¿Cómo se desarrollará la situación?

La economía turca está creciendo, pero los altos tipos de interés y la debilidad de la lira están causando problemas a la población. ¿Cómo se desarrollará la situación?

Según un informe de www.businessinsider.de,
Turquía está experimentando actualmente un auge económico. A pesar de la alta inflación y la debilidad de la moneda, la economía está creciendo con fuerza. Según datos de la OCDE, Turquía será uno de los países industrializados con mayor crecimiento económico en 2023. La evolución positiva se debe al giro de 180 grados del presidente Recep Tayyip Erdogan. Este cambio también ha llevado a la agencia de calificación S&P a mejorar sus perspectivas sobre la solvencia de Türkiye.
A pesar de los grandes desafíos que enfrenta la economía turca, hay algunos factores que están impulsando el crecimiento del país. Por un lado, la población está creciendo, lo que genera oportunidades de crecimiento y una demanda reprimida de consumo. El comercio con Rusia ha aumentado debido a la guerra en Ucrania y Turquía se está convirtiendo en un centro del comercio con Rusia. Además, la reconstrucción tras el devastador terremoto está provocando un auge de la construcción del que se benefician partes importantes de la economía turca.
Sin embargo, la alta inflación y la debilidad de la moneda son un desafío importante para la economía turca. Otro desafío es la dependencia de las importaciones, ya que Turquía tiene que importar más del 95 por ciento de su energía y muchos productos alimenticios. Esto genera costos crecientes para el país. Recientemente se elevaron las tasas de interés al 40 por ciento para combatir la caída de la moneda, pero hasta ahora esto ha tenido un éxito limitado. Sin embargo, existe la posibilidad de que Turquía siga siendo uno de los países de más rápido crecimiento del mundo.