Calor extremo en India: ¡economía y salud al límite!
Las olas de calor extremas en la India amenazan la salud y la economía: las previsiones muestran graves consecuencias para la población y el PIB de aquí a 2030.

Calor extremo en India: ¡economía y salud al límite!
India se enfrenta a una amenaza cada vez mayor por el calor extremo, que no sólo está ejerciendo una enorme presión sobre la salud de la población sino también sobre la economía. Según informes recientes, en la India viven 1.400 millones de personas, casi la mitad de las cuales trabajan al aire libre. Muchos de ellos corren un riesgo especial debido al aumento de las temperaturas, ya que sólo alrededor del 10% de la población tiene aire acondicionado. Los riesgos relacionados con el calor ya han causado importantes pérdidas económicas y problemas de salud, lo que refuerza la necesidad de tomar medidas urgentes.
Las olas de calor en la India, cada vez más frecuentes y más tempranas, provocan que en determinadas regiones las temperaturas puedan superar los 50 grados centígrados. Según The Lancet, se estima que en 2023 se perdieron 182 mil millones de horas de trabajo potenciales debido al calor extremo. Si estas tendencias continúan, se prevé una disminución de 34 millones de empleos a tiempo completo para 2030, particularmente en la agricultura y la construcción. En 2021, el calor provocó pérdidas de ingresos de alrededor de 159 mil millones de dólares, equivalente al 5,4% del producto interno bruto (PIB) de la India.
Riesgos y medidas para la salud.
Los efectos del calor extremo sobre la salud son graves. Se estima que un día de calor extremo puede provocar 3.400 muertes adicionales en la India; En una ola de calor de cinco días, la cifra podría aumentar a 30.000. También en Europa se registraron 61.000 muertes adicionales debido a las altas temperaturas en el verano de 2022. El calor puede provocar diversos problemas de salud, como accidentes cerebrovasculares, enfermedades respiratorias y ataques cardíacos, lo que sobrecarga los servicios de salud pública, especialmente en los hospitales que a menudo carecen de aire acondicionado.
El sistema de salud también es menos resiliente debido a las malas condiciones en muchos espacios habitables. En las ciudades, las temperaturas nocturnas a menudo permanecían altas en hogares mal ventilados, lo que dificultaba la recuperación de los trabajadores. Sin embargo, algunas autoridades locales están tomando medidas exigiendo a los empleadores que proporcionen sombra, descansos y agua.
Consecuencias económicas y tendencias globales.
Los desafíos económicos causados por las olas de calor no se limitan a la India. Las predicciones sugieren que podrían ocurrir pérdidas similares en países como Tailandia, Camboya y Pakistán para 2030. En Estados Unidos, las pérdidas económicas relacionadas con el calor suman alrededor de 100 mil millones de dólares al año, que podrían aumentar a 500 mil millones de dólares en los próximos 25 años. También en Europa se esperan pérdidas del PIB de entre el 0,3 y el 0,5% anual debido a las olas de calor. En 2023, los desastres naturales causaron 380 mil millones de dólares en daños económicos en todo el mundo, una clara señal de la creciente amenaza del cambio climático.
El gobierno indio ya ha tomado medidas para mitigar el impacto de las olas de calor e introdujo herramientas de previsión. Sin embargo, se necesitan estrategias de riesgo climático más integrales que integren instrumentos financieros innovadores para proteger a los grupos vulnerables. En colaboración con la Coalición para una Infraestructura Resiliente a los Desastres (CDRI), el objetivo es promover enfoques comunitarios y sensibles al género para abordar estos desafíos.
Una planificación urbana eficaz es crucial para contrarrestar las temperaturas extremas. Los métodos de construcción históricos y conceptos modernos como las calles estrechas de Sevilla, las calles blancas de Los Ángeles o los tejados verdes de Xiamen muestran cómo el diseño urbano inteligente puede reducir las temperaturas. Se deben sustituir materiales como el asfalto y el hormigón para absorber menos calor y mejorar la calidad de vida en las zonas urbanas.
Los desafíos que plantean las olas de calor requieren una acción conjunta y estructurada. El cambio climático sigue siendo una amenaza grave y corresponde a los gobiernos desarrollar e implementar soluciones innovadoras para mejorar de manera sostenible las condiciones de vida de las poblaciones afectadas.