El clima extremo amenaza la producción mundial de vino

El clima extremo amenaza la producción mundial de vino

El año 2023 trajo uno de los desafíos más duros para la producción vitivinícola mundial, provocado por fenómenos climáticos extremos. Especialmente en Italia la situación fue alarmante: la producción de vino cayó un 23 por ciento. Australia también experimentó una disminución del 26 por ciento debido a sequías, incendios y otros problemas relacionados con el clima. España, Chile y Sudáfrica también se vieron afectados, mientras que Francia experimentó sorprendentemente un aumento.

A pesar de las previsiones optimistas, Alemania experimentó un ligero descenso del 3,8 por ciento en la producción de vino. Esto desmiente las estimaciones anteriores de la OIV en noviembre. Sin embargo, Alemania mantuvo su posición entre los diez principales países productores de vino. La producción mundial total de vino cayó de 262,6 millones de hectolitros en 2022 a 237,3 millones de hectolitros en el año del informe. Esto pone de relieve el impacto masivo de las condiciones climáticas extremas en la industria.

John Bark, director general de la OIV, destacó que la crisis climática es la mayor amenaza para la industria del vino. La vid es particularmente vulnerable a los cambios climáticos, lo que requiere ajustes estratégicos en el cultivo. La caída del tres por ciento en el consumo mundial de vino se debe en parte al aumento de la inflación y a la desaceleración del mercado en China. Estos desarrollos representan desafíos adicionales para la industria.