Aumentos de precios de los alimentos: expertos informáticos ingeniosos en lugar de políticos: la base de datos de transparencia falló
¿Se anuncia una gran comparación de precios, pero no hay resultados? Lea por qué fracasó el gobierno y los expertos privados en TI revelaron los precios. #Precios de los alimentos #Transparencia #Política #Comparación de precios

Aumentos de precios de los alimentos: expertos informáticos ingeniosos en lugar de políticos: la base de datos de transparencia falló
El aumento de los precios de los alimentos el año pasado llevó a los políticos a tomar medidas. Sin embargo, un proyecto prometedor para crear una base de datos transparente para comparar precios no fue iniciado por el gobierno, sino por expertos privados en TI. Estas iniciativas privadas demostraron rápidamente que era posible identificar patrones de precios en los supermercados.
El año pasado, el vicecanciller Werner Kogler y el ministro de Asuntos Sociales, Johannes Rauch, invitaron a una “cumbre alimentaria”. El ministro de Economía, Martin Kocher, anunció la creación de una base de datos sobre transparencia de precios para mejorar la comparabilidad de los precios de los alimentos. Esta medida debería permitir a los consumidores comparar mejor los precios e identificar ofertas.
A pesar de los anuncios de los políticos, no hubo pasos concretos. En cambio, expertos privados en TI como Mario Zechner le mostraron a heisse-preise.io en poco tiempo cómo se pueden crear bases de datos de precios. Estos proyectos revelaron patrones en los precios de los supermercados, como precios idénticos para productos de las marcas propias de descuento S-Budget y Clever.
En otoño, la Autoridad Federal de Competencia presentó propuestas para aumentar la transparencia de los precios. Kocher prometió una propuesta legislativa, pero aún no se ha aplicado. A pesar de los pedidos de una aplicación gubernamental de fijación de precios, nada de esto se ha materializado hasta ahora y parece poco probable que esto cambie en el futuro.
En respuesta a una pregunta parlamentaria, Kocher explicó que, debido a las herramientas privadas de comparación de precios existentes, no era necesaria una alternativa gubernamental. El argumento sugiere que los consumidores ya tienen suficiente información para hacer comparaciones de precios. Sin embargo, los consumidores todavía pueden recurrir a proyectos privados para comparar precios y lograr posibles ahorros.