Putin hace sonar la alarma: ¡las sanciones occidentales están llevando a Rusia a la crisis!

Putin hace sonar la alarma: ¡las sanciones occidentales están llevando a Rusia a la crisis!

La economía rusa está bajo una inmensa presión y el presidente Vladimir Putin está alarmado. Las sanciones occidentales ahora están teniendo un impacto claro: la inflación en Rusia se está disparando a un alarmante 9,3 por ciento, que es más de cuatro veces la tasa de inflación alemana del 2,2 por ciento en diciembre. Esto provocó aumentos masivos de los precios, que están ejerciendo presión tanto en el sector minorista como en el de la aviación. Según la agencia estatal de noticias TASS, Putin calificó las sanciones como una "señal alarmante" y reconoció que las respuestas de su gobierno no fueron suficientes para combatir los problemas. Los expertos advierten que se avecina una ola de quiebras que amenaza aún más la estabilidad económica de Rusia Mercurio informó.

También está la dimensión política de esta crisis, particularmente en lo que respecta a Hungría. El primer ministro Viktor Orbán está siendo criticado por amenazar con no ampliar las sanciones de la UE contra Rusia. Orbán quiere esperar y ver cómo decide el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, antes de tomar una decisión final. Esto podría poner en peligro la unidad de la Unión Europea y favorecer a Rusia. Una salida de Hungría podría significar que Rusia pueda volver a hacer negocios con Europa sin obstáculos, lo que plantea enormes desafíos para Occidente. En ese caso, la UE tendría que aceptar una pérdida del aislamiento económico de Rusia, lo que podría conducir a un punto de inflexión catastrófico en la situación geopolítica, ya que Tiempo analizado.

Putin también culpa a la reacción tardía del banco central ruso y señala la presión que el gasto de guerra está ejerciendo sobre el desarrollo económico. China sigue siendo el socio comercial más importante de Rusia, pero muchos bancos importantes se han retirado debido a las sanciones occidentales. Estos acontecimientos dinámicos podrían desestabilizar aún más el equilibrio económico en la región, mientras se desvanecen las esperanzas de una pronta recuperación de la economía rusa.