La economía rusa al borde del abismo: ¡la recesión se avecina y Putin está bajo presión!
El ministro de Economía de Rusia advierte sobre una recesión inminente. Las altas tasas de interés y las sanciones están ejerciendo una gran presión sobre la economía.

La economía rusa al borde del abismo: ¡la recesión se avecina y Putin está bajo presión!
La economía rusa se enfrenta a un punto de inflexión crítico, como advirtió el ministro de Economía, Maxim Reshetnikov, en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo. En su discurso destacó que la actual situación económica muestra una importante desaceleración y que los empresarios están al borde de la recesión. A esto se suman las altas tasas de interés, que hacen que las inversiones sean cada vez menos atractivas. Según Reshetnikov, las inversiones en el tercer y cuarto trimestre podrían estar por debajo del nivel del año anterior. Pidió al banco central ruso que brinde más apoyo a la economía.
En su discurso del 20 de junio, Vladimir Putin también habló sobre la situación de la economía rusa y los desafíos a los que se enfrenta actualmente. Sin embargo, la presidenta del Banco Central, Elvira Nabiullina, justificó la política monetaria y señaló que la economía había crecido a pesar de las sanciones, lo que se debía principalmente a los programas de desplazamiento de importaciones y a las reservas de capital existentes. Si bien el banco central elevó la tasa de interés clave al 21 por ciento en octubre de 2024, recientemente la redujo al 20 por ciento para contrarrestar la recesión que se avecina.
Impacto de las sanciones
Inicialmente, la economía rusa se mantuvo relativamente estable después del inicio del conflicto en Ucrania, en particular debido a un cambio hacia la producción de guerra. Si bien la industria de defensa ha experimentado un aumento significativo en la producción de municiones y armas, los sectores civiles están luchando con altos costos, escasez de personal y retrasos técnicos, que se ven exacerbados aún más por las sanciones internacionales. Los sectores de la construcción y el inmobiliario, así como la industria automovilística, se han visto gravemente afectados porque muchas empresas y proveedores occidentales han abandonado el mercado ruso.
No se puede pasar por alto el impacto de la política militar en la economía. Se espera que el gasto militar de Rusia aumente un 25 por ciento a 13,5 billones de rublos en 2025. Este gasto representa ahora entre el 7 y el 8 por ciento del producto interno bruto, un récord en la historia postsoviética. A pesar del reducido crecimiento de los ingresos públicos provenientes de las exportaciones de energía, la alta demanda gubernamental está impulsando el llamado boom de guerra en ciertos sectores de la economía. Sin embargo, esta evolución también ha provocado un aumento significativo de la inflación, que se registró en el 9,7 por ciento en octubre de 2024.
Los desafíos del futuro
Al mismo tiempo, la economía rusa sufre una grave escasez de mano de obra. Aunque el desempleo es relativamente bajo (2,4 por ciento), muchos puestos siguen sin cubrir. Desde 2023 se han creado alrededor de 520.000 nuevos puestos de trabajo en la industria de defensa. Sin embargo, la producción en este sector está creciendo más lentamente porque la escasez de habilidades y las sanciones occidentales dificultan la instalación de nuevas plantas. Como resultado, Rusia importa cada vez más armas de países como Irán y Corea del Norte porque su propia producción no es suficiente.
Las perspectivas de crecimiento económico para 2025 se estiman en un magro 0,5 a 1,5 por ciento, una desviación significativa de las previsiones anteriores. Se planea aumentar los impuestos a las personas con altos ingresos y a las empresas para aliviar la carga sobre las arcas estatales, mientras que el gasto social está cayendo debido a una disminución en el número de pensionados. El desafío clave sigue siendo equilibrar las necesidades militares y la tan necesaria estabilidad económica, mientras la presión de las sanciones externas y los problemas internos continúa creciendo.
La economía rusa se encuentra, por tanto, en un punto crítico en cuyo desarrollo influyen decisivamente factores tanto internos como externos. La forma en que Rusia responda a este punto de inflexión será de gran importancia en los años venideros.
fr.de informa que la situación actual plantea riesgos importantes.
swp-berlin.org También proporciona un análisis de las consecuencias a largo plazo de las estrategias militares y económicas de Rusia.