Impuestos para los ricos: ¡el fraude cuesta miles de millones mientras el dinero de los ciudadanos lucha por todos!

Transparenz: Redaktionell erstellt und geprüft.
Veröffentlicht am

El Canciller Merz está planeando medidas contra el abuso social, mientras que la evasión fiscal de los ricos cuesta miles de millones.

Bundeskanzler Merz plant Maßnahmen gegen Sozialmissbrauch, während Steuerhinterziehung von Reichen Milliarden kostet.
El Canciller Merz está planeando medidas contra el abuso social, mientras que la evasión fiscal de los ricos cuesta miles de millones.

Impuestos para los ricos: ¡el fraude cuesta miles de millones mientras el dinero de los ciudadanos lucha por todos!

En Alemania, los planes del gobierno federal para combatir el abuso de las prestaciones sociales están en el centro de las discusiones, mientras que al mismo tiempo la elevada deuda del estado sigue siendo un tema apremiante. El canciller Friedrich Merz y su coalición quieren tomar medidas contra el abuso de las prestaciones sociales, y la ministra de Trabajo y Asuntos Sociales, Bärbel Bas (SPD), quiere tomar medidas decisivas contra las “estructuras mafiosas” en el fraude monetario a los ciudadanos. Según las estimaciones actuales, el potencial de ahorro procedente del fraude monetario de los ciudadanos podría rondar los 260 millones de euros, aunque esta cifra no alcanza el ahorro que consigue el Estado al no utilizar las prestaciones sociales.

La tasa de malversación del dinero de los ciudadanos ronda el 4%, mientras que la no utilización alcanza una alarmante cifra del 35 al 70%. Estos debates sobre el abuso de beneficios también ayudan a promover la narrativa del “parásito del bienestar”, que perjudica al Estado de bienestar y debilita el poder de negociación de los trabajadores. Los consultores de gestión temen que tal enfoque distraiga la atención de los verdaderos problemas, en particular la evasión fiscal por parte de personas muy ricas, que asciende a entre 10 y 15 mil millones de euros al año.

La evasión fiscal y sus consecuencias

Uno de los principales críticos de las actuales discusiones es el ex millonario Sebastian Klein, quien pide más personal para las investigaciones fiscales y las oficinas de impuestos para contrarrestar eficazmente la evasión fiscal. Subraya que los impuestos tienen una imagen enormemente distorsionada y algunos sectores de la sociedad los consideran antiempresariales. Sin embargo, estos fondos regresan a la comunidad y son indispensables para el Estado.

Un ejemplo del problema de los privilegios fiscales es el cambio de ley que redujo los impuestos sobre las ganancias de la directora ejecutiva de BMW, Susanne Klatten, del 60% al 30%. La falta de recaudación del impuesto sobre el patrimonio, que está anclado en la ley, es otro tema que recibe poca atención en los debates actuales.

El dinero de los ciudadanos y los prejuicios sociales

Paralelamente a los debates sobre la evasión fiscal, también se debate sobre el dinero de los ciudadanos. Después de conversaciones exploratorias entre la Unión (CDU/CSU) y el SPD, Alemania planea cambios en beneficio de los ciudadanos para fortalecer la inserción laboral y promover una integración más rápida de las personas sanas en el mercado laboral. El debate sobre el abuso de las prestaciones sociales surge no sólo a nivel interno, sino también entre las personas que viven en el extranjero.

El experto fiscal Florian Köbler destaca que las pérdidas económicas causadas por la evasión fiscal son mucho mayores que las causadas por el fraude monetario a los ciudadanos. En 2022, el fraude monetario a los ciudadanos ascendió a unos 272,5 millones de euros, mientras que la evasión fiscal le cuesta al Estado más de 200 mil millones de euros al año. Alrededor de 70 mil millones de euros de estos impuestos evadidos provienen de industrias que hacen un uso intensivo de efectivo y de declaraciones de impuestos falsas. Para hacer frente a estos desafíos, Köbler pide el uso de inteligencia artificial (IA) en las investigaciones fiscales y propone abolir las declaraciones de impuestos para los empleados que solo tienen ingresos como empleados, inspirándose en modelos exitosos en los países escandinavos.

Así, los debates sobre el fraude monetario de los ciudadanos distraen la atención de la urgente necesidad de abordar la cuestión mucho más amplia de la evasión fiscal y muestran que es necesario un debate equilibrado para abordar los verdaderos desafíos en los sectores social y económico.

Para obtener más información sobre este tema, puede leer los informes de fr.de y giessener-anzeiger.de leer.