Thomas Rabe bajo presión: ¡Los accionistas de Adidas exigen perspectivas claras!

Thomas Rabe bajo presión: ¡Los accionistas de Adidas exigen perspectivas claras!

Thomas Rabe, de 59 años, presidió hoy la asamblea general de Adidas y estuvo presente con una chaqueta de entrenamiento negra. Rabe es miembro del consejo de supervisión desde 2019 y ocupa el cargo de presidente desde 2020. Sin embargo, su puesto como presidente del consejo de supervisión está bajo presión. Abundan las dudas de los inversores sobre su capacidad para liderar tanto Bertelsmann como RTL y Adidas Periódico del sur de Alemania bastante común.

Antes de la asamblea general, cuatro importantes sociedades de fondos (Allianz Global Investors, Union Investment, DWS y Deka Investment) expresaron su intención de votar en contra de la prórroga del mandato de Rabe. Los puntos críticos incluyen la falta de un candidato sucesor y la escasa proporción de mujeres en el consejo de supervisión, que es sólo 4 de 16 miembros. Sin embargo, al final Rabe obtuvo un 64,4 por ciento de aprobación para continuar con su mandato, lo que se interpreta como un resultado débil.

Retos y estrategias

Mientras tanto, el director ejecutivo Bjørn Gulden, que pasó de Puma a Adidas a principios de 2023, describe los desafíos actuales de la empresa. Estos se caracterizan por incertidumbres políticas globales y una política aduanera difícil. A pesar de las dificultades, Gulden ve una evolución positiva y ha anunciado que Adidas pretende volver al sector deportivo. Al mismo tiempo, la empresa planea recuperar cuota de mercado en Europa, mientras que Nike muestra debilidades.

Gulden presentó una nueva estrategia destinada a fortalecer la independencia de los mercados regionales. Adidas espera unas ventas de 23,7 mil millones de euros y un beneficio operativo de 1,34 mil millones de euros para 2024, con un aumento a 1,8 mil millones de euros en 2025. Estos ambiciosos objetivos deberían alcanzarse en las condiciones de mercado dadas.

Cambios en el consejo de supervisión

Otro aspecto importante de la asamblea general fue la elección de Christian Klein, director general de SAP, para el consejo de supervisión. Debido a la crisis del coronavirus, los miembros del Consejo de Supervisión han renunciado al 30 por ciento de su remuneración para el presente ejercicio. Los ahorros se donan, entre otros, a Aldeas Infantiles SOS. Esta medida llega tras las importantes pérdidas sufridas por Adidas durante la pandemia. En el segundo trimestre se registró una pérdida de 306 millones de euros, mientras que el mismo periodo del año pasado terminó con un beneficio de 462 millones de euros.

Durante la crisis, Adidas dependió de préstamos de ayuda de hasta tres mil millones de euros, respaldados por el grupo KfW. En abril de 2020, el 70 por ciento de las tiendas Adidas en todo el mundo estaban cerradas. Por lo tanto, Rabe y Gulden se enfrentan a la tarea de guiar a la empresa a través de esta fase turbulenta y al mismo tiempo garantizar el éxito futuro, mientras que los conocedores esperan que Rabe pueda presentar a Oliver Mintzlaff como su sucesor en 2026.

En resumen, la asamblea general de Adidas muestra que, a pesar de los desafíos y críticas existentes, hay cierta esperanza de que se produzcan avances positivos y un reajuste estratégico. Los próximos pasos serán cruciales para el futuro de la empresa.