De la inflación a la deflación: causas, efectos y perspectivas del mercado: un experto financiero analiza la evolución actual.

De la inflación a la deflación: causas, efectos y perspectivas del mercado: un experto financiero analiza la evolución actual.

Según un informe de finanzmarktwelt.de, la deflación describe la disminución de los niveles de precios en una economía, mientras que la inflación se caracteriza por el aumento de los precios. Las causas de la deflación pueden ser una reducción de la oferta monetaria y una menor inversión por parte de las empresas, provocadas por políticas monetarias restrictivas de los bancos centrales.

Después de un fuerte aumento de la oferta monetaria durante la pandemia, esto desencadenó la inflación, que fue frenada por la Reserva Federal y el BCE con un agresivo ciclo de subidas de tipos de interés en 2023. La tasa de inflación anual en Estados Unidos cayó al 3,1% en noviembre de 2023, mientras que se desaceleró al 2,4% en la zona del euro.

Ahora se está discutiendo si a la fuerte subida de precios podría seguirle una deflación. Los datos históricos muestran que los fuertes episodios de inflación suelen ir seguidos de rápidas caídas y, en última instancia, deflación. Aunque actualmente la tasa de inflación en EE.UU. sigue siendo del 3%, hay argumentos que apuntan a una posible deflación.

Según los economistas, la deflación sería incluso más peligrosa que la inflación porque los consumidores y las empresas frenarían sus compras en previsión de una caída de los precios. Por lo tanto, existe la preocupación de que los mercados estén siendo demasiado optimistas sobre la desaceleración de la inflación y estén esperando recortes masivos de las tasas de interés por parte de los bancos centrales para permitir un aterrizaje suave de la economía.

Una posible deflación podría tener un fuerte impacto en los mercados bursátiles y amenazar las expectativas de un aumento de los beneficios empresariales en 2024 y evitar una recesión. Por lo tanto, los mercados caminan sobre una delgada línea, ya que el mejor de los casos depende de evitar una nueva inflación y un aterrizaje suave de la economía. Queda por ver si los indicadores actuales realmente apuntan a una posible deflación.