Los precios del pan se disparan en Irán: ¡ciudadanos alborotados!

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Irán enfrenta una creciente crisis económica a medida que aumentan los precios del pan y estallan las protestas por el costo de la vida.

Los precios del pan se disparan en Irán: ¡ciudadanos alborotados!

En Irán, la población vuelve a verse presionada por el drástico aumento de los precios de los alimentos. El 14 de julio de 2025, la agencia de noticias estatal Shargh informó que el régimen de Teherán ha decidido detener por el momento los aumentos planeados en los precios del pan. Esto ocurre en el contexto de una creciente crisis económica, que se caracteriza por altos ajustes de precios de los alimentos básicos. Sin embargo, en varias provincias, como Razavi-Khorasan y Qom, se han implementado silenciosamente importantes aumentos de precios, lo que ha causado preocupación y resentimiento entre la población.

Se ha ordenado a las panaderías de Teherán que cocinen pan a los precios actuales, ya que el presidente de la Cámara del Gremio de Teherán, Hamidreza Rastgar, confirmó el aplazamiento de los planes de precios debido a "circunstancias especiales". En la provincia de Razavi-Khorasan, los precios del pan subsidiado y semisubsidiado aumentaron entre un 42 y un 52 por ciento, lo que afectó directamente los medios de vida de muchos ciudadanos. En Mashhad, el pan Barbari cuesta ahora 3.000 toman, mientras que el pan Sangak cuesta 5.200 toman.

Símbolo de descontento

El pan tiene un inmenso significado simbólico en Irán, especialmente para la clase trabajadora. Los cambios de precios se perciben no sólo como una carga económica, sino también como un ataque directo a los medios de vida de millones de personas. Históricamente, los aumentos del precio del pan a menudo han provocado malestar social. El régimen es consciente de su carácter explosivo y está llevando a cabo un peligroso acto de equilibrio entre presión económica y estabilidad política.

Además, los recientes aumentos de precios de alimentos básicos como huevos, arroz y carne han dado lugar a manifestaciones de protesta. Según informes, el jueves estallaron violentos enfrentamientos en el suroeste del país, con una mezquita incendiada y un supermercado saqueado. Sin embargo, las fuerzas de seguridad lograron controlar la situación.

Tonos políticos en la crisis

Los manifestantes exigen, entre otras cosas, la dimisión del presidente Ebrahim Raisi, que ha sido objeto de duras críticas en las últimas semanas. Muchos lo acusan de no haber podido cumplir su promesa electoral de poner fin rápidamente a la crisis económica. No es ningún secreto que Irán sufre desde hace mucho tiempo una grave crisis económica y financiera. Esta crisis se ha visto exacerbada por las sanciones impuestas por Estados Unidos desde que se retiró del acuerdo nuclear de Viena en 2018. Como resultado, Irán no tiene acceso a sus cuentas bancarias en el extranjero y su moneda nacional, el rial, ha perdido más del 50 por ciento de su valor.

El régimen ha decidido adoptar un enfoque de ajuste de precios regional para evitar grandes protestas en la capital. Los analistas dicen que el gobierno busca mantener bajo control el descontento generalizado por los precios de los alimentos. Sin embargo, la presión para reducir los subsidios impuestos anteriormente plantea un desafío que podría poner en grave peligro la estabilidad política.