Política energética alemana: se necesita urgentemente un retorno al mercado y a la competencia

Política energética alemana: se necesita urgentemente un retorno al mercado y a la competencia

Según un artículo de www.merkur.de, el profesor Volker Wieland advierte sobre los efectos de la política económica alemana. La introducción prevista de un precio de la electricidad industrial después de la transición a la bomba de calor podría representar otra tumba de mil millones de dólares. El cierre de las centrales nucleares y la prohibición de explotar los yacimientos alemanes de gas de esquisto han provocado una crisis energética. Estas medidas provocan una escasez de electricidad y un aumento de los costos de la energía, lo que lleva a las industrias a trasladar su producción al extranjero. Una política que se basa en prohibiciones y subsidios no es efectiva. El experto pide una política energética pragmática y una política climática orientada a Europa para reducir de forma rentable las emisiones de gases de efecto invernadero y fortalecer a Alemania como lugar.

La introducción de un precio de la electricidad industrial podría suponer una carga importante para el mercado y el sector financiero. El aumento de los costes de la energía reduciría la rentabilidad de las empresas, lo que podría provocar una disminución de los volúmenes de inversión y la migración de la industria al extranjero. Además, mayores deudas o impuestos sobre empresas y hogares podrían afectar el desarrollo económico. La falta de infraestructura para las energías renovables y el hidrógeno verde podría provocar más cuellos de botella y poner en peligro la competitividad de Alemania.

Para mitigar las consecuencias de la política energética, el profesor Wieland aboga por una política energética pragmática que amplíe el suministro de energía y una política climática de orientación europea que limite las emisiones de gases de efecto invernadero en toda Europa. Esto ayudaría a garantizar que se ahorren emisiones donde sea más rentable, en lugar de perseguir objetivos del sector alemán de pequeña escala que se encarecen mediante prohibiciones y subsidios. Una política que utilice el mercado y la competencia y cree un marco fiscal competitivo es crucial para fortalecer a Alemania como lugar de negocios.