El jefe de BMW, Zipse, advierte: ¡La prohibición de los motores de combustión pone en peligro el futuro del automóvil en Europa!

Transparenz: Redaktionell erstellt und geprüft.
Veröffentlicht am

El jefe de BMW, Oliver Zipse, advierte de los riesgos de los aranceles punitivos y de la prohibición de los motores de combustión prevista para 2035 para la industria automovilística europea.

El jefe de BMW, Zipse, advierte: ¡La prohibición de los motores de combustión pone en peligro el futuro del automóvil en Europa!

El director general de BMW, Oliver Zipse, critica duramente a la Comisión de la UE y advierte de las graves consecuencias que los aranceles punitivos, los conflictos comerciales y la prohibición prevista de los motores de combustión interna podrían tener para la industria automovilística europea. Califica la prohibición prevista para 2035 de “un desastre” que pone en peligro la capacidad innovadora de los fabricantes europeos. Según Zipse, los aranceles actuales de la UE de casi el 31% sobre las importaciones de automóviles eléctricos de fabricantes occidentales procedentes de China son problemáticos, especialmente para BMW, que produce automóviles en China y los exporta a Europa. Esto contrasta con los aranceles que Estados Unidos impuso a los modelos europeos durante el gobierno de Trump, que se situaron en el 27,5%.

El comercio con Estados Unidos es crucial para BMW Group. La planta de Spartanburg, Carolina del Sur, produce alrededor de 430.000 vehículos al año, algunos de los cuales están destinados al mercado estadounidense. Zipse se muestra optimista sobre las negociaciones aduaneras con los EE.UU. y apuesta por un modelo comercial para compensar importaciones y exportaciones. Sin embargo, advierte sobre aranceles de represalia por parte de la UE contra Estados Unidos, lo que podría conducir a una peligrosa espiral arancelaria. Para evitar tales escenarios, Zipse pide más cooperación y pragmatismo en el comercio.

La apertura tecnológica es clave

Zipse apuesta por una gama tecnológicamente diversa que incluya no sólo coches eléctricos, sino también motores de combustión clásicos, híbridos enchufables y vehículos de hidrógeno. Critica la prohibición prevista de los coches nuevos con motor de combustión a partir de 2035 y advierte que esto podría poner en peligro la competitividad de la industria automovilística europea. Zipse cree que la prohibición podría revocarse en un plazo de tres años, sobre todo por los elevados costes.

Su enfoque incluye una consideración integral de todo el ciclo de vida del vehículo, que también debería tener en cuenta las alternativas al diésel con bajas emisiones de CO₂. Aunque BMW está adaptando su fábrica de Múnich a la producción de coches exclusivamente eléctricos, la empresa sigue confiando en una variedad de tecnologías de propulsión. Zipse enfatiza la necesidad de no depender únicamente de los automóviles eléctricos y la tecnología de baterías, ya que la dependencia de las cadenas de suministro de baterías asiáticas es fundamental.

Sostenibilidad y fuerza innovadora

BMW está invirtiendo específicamente en sostenibilidad y sigue una estrategia que incluye propulsores alternativos, como combustibles sintéticos y tecnologías de hidrógeno. Zipse considera que la empresa tiene una ventaja sobre otros fabricantes. Defiende las inversiones en hidrógeno del Grupo BMW y considera que el hidrógeno no tiene alternativa a largo plazo.

El mercado privado de coches eléctricos se está desarrollando lentamente, en parte debido a la falta de modelos más baratos. Actualmente, la red eléctrica alemana sólo podrá abastecer como máximo a la mitad de los coches eléctricos en el futuro previsible. En la próxima IAA, BMW presentará la nueva plataforma para vehículos eléctricos "Neue Klasse", y la compañía enfatiza que no quiere depender únicamente de esta forma de conducción.

Por último, Zipse advierte de conflictos comerciales que podrían causar daños importantes a la industria automovilística alemana. Para garantizar la competitividad futura, pide intercambios internacionales y una política comercial y de transporte abierta a la tecnología. Esto es crucial para proteger la fuerza innovadora y la posición de mercado de la industria automovilística europea.

Para más información sobre las declaraciones de Oliver Zipse, consulte el artículo. Mercurio y Enfocar.